Friday, November 18, 2005

Fresa y Chocolate.....No more

Anoche me apetecía ver "El verano de Kikujiro" de Takeshi Kitano, premiada en La Seminci. Empecé a verla, pero......las detallistas de mis hermanastras cuando tuvieron oportunidad, cogieron el mando del televisor y cambiaron de canal, para gozar con Cuéntame y Big Brother. Me levanté con una mala sangre, tendí mi ropa y me fui a dormir. Espero encontrarla en algún videoclub.

En otro orden de cosas,.......les hablaré de mi hermana. Bea acabó la carrera, Trabajo Social, hizo prácticas de verano, marchó a Inglaterra 3 semanas con una beca. Estando allá le llamaron para ofrecerle trabajo, pero a su regreso, no se habían aprobado presupuestos, con lo cual, no la contrataban. Empezó a trabajar en la plantación de la fresa, así que, a partir de ahora será Fresita. Cuando acabó, decidió venir de visita a Madrid, una visita prometida hace 3 años. Me la traje, le gustó Madrid, sus exposiciones, la gente, las bibliotecas, mi casa, el metro.....cuando se iba a marchar para el pueblo, hizo 2 entrevistas. Le seleccionaron en una y comenzó a trabajar. Con lo cual, no marchó. Empezamos a realizar lo que ahora se llama La cama caliente. Ella trabaja de noche y duerme por el día. Yo trabajo por el día y duermo por la noche. Hasta aquí, perfecto. El finde, al revés, yo salgo por la noche y duermo por el día y ella sale por el día y duerme por la noche. Necesito un periquito que me saque de casa........Empezamos a buscar un piso para ella, pero hay un pequeño handicap: a ella le gusta mi casa, y cualquier casa que ve, le parece poco. Yo soy muy celosa con mis cosas y mi intimidad, pero no le voy a dejar en la calle.
Seguimos buscando piso. Cuando le coge el teléfono un extranjero, cuando cuelga dice: "Una búlgara....". Para ella, todos son búlgaros, incluso yo, que también soy inmigrante.

Un par de anécdotas. El sábado........anulada la historia por ofensa a los aludidos. ¿Desprestigio?. No. Cada uno que lo interprete como quiera. Y anulada la foto.

Segunda anécdota. Mi hermana llamó a un número que encontró en una facultad y alquilaban habitación. Le respondió un chico, dijo que no tenía habitación, que ya estaba alquilada, pero que preguntaría a algún amigo. Se pusieron a charlar y él la invitó a un café. Ella no aceptó pero le dió las gracias. Al cabo de unos minutos le llega un mensaje del chaval, diciéndola que lo del café sigue en pie. Está claro que se puede entablar amistad en cualquier lugar, y más si eres agradable.

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